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2. Por qué perseguimos métricas que no importan (aunque sepamos que son inútiles)

Las métricas vacías tienen dos poderes peligrosos:

(1) Te hacen sentir que vas bien

No estás vendiendo, pero suben las visitas.
No tienes retención, pero tu video en X se viraliza.
No tienes caja, pero “la comunidad está activa”.

Ese subidón emocional es gasolina de autoengaño.

Como dice Jason Fried en Rework,

Las métricas que no importan alimentan el ego.
Las que sí importan suelen incomodar.

Por eso evitamos mirarlas.

(2) Son fáciles de mejorar

Viralizar un vídeo cuesta menos que mejorar un producto.
Meter leads fríos en el CRM es más fácil que cerrar un cliente real.
Conseguir descargas con Ads es infinitamente más fácil que retener.

“Lo fácil” siempre aparece antes que “lo que importa”.

Pero lo fácil nunca construye empresas.

3. La trampa psicológica del dashboard bonito

Hay algo que casi nadie admite:
las métricas de vanidad sirven de anestesia.

Si tu startup no vende, los números bonitos te permiten no afrontar el problema.

Un ejemplo típico:

• 200 nuevos leads → bien

• 10.000 visitas → bien

• 3.000 descargas → bien

• 0 ventas → silencio

Muchos fundadores prefieren inflar la parte superior del funnel antes que aceptar la única verdad decisiva:

Da miedo mirar de frente la realidad, por eso preferimos mirar los números que tranquilizan.

Pero ese miedo cuesta meses, capital y oportunidades.

4. ¿Qué dicen los referentes sobre esto? (No soy yo, es la historia)

Para reforzar esta idea, tres voces clave:

Jason Fried & DHH — Rework

Su filosofía es brutalmente simple:
Construye algo útil. Cobrando desde el principio. Punto.

Critican abiertamente la obsesión por métricas vacías y el mito de “crecer antes de vender”.

Marc Andreessen — El test definitivo del PMF

Andreessen lo resume en una frase que debería estar impresa en cada coworking:

El caso Quibi / MoviePass / Clubhouse

Millones de descargas.
Ingresos insignificantes.
Retención pésima.
Muertes rápidas.

El éxito superficial no construye futuro.

La historia lo ha demostrado una y otra vez.

5. ¿Qué métricas NO importan cuando estás al borde?

Estas no significan absolutamente nada si no hay ingresos detrás:

• Descargas

• Registros

• Leads brutos

• Seguidores

• Impresiones

• Visitas web

• Tiempo en página

• “Engagement” en redes

• Crecimiento mensual en usuarios gratuitos

Pueden ayudar más adelante, sí.
Pero cuando no tienes caja suficiente para sobrevivir… simplemente estorban.

Peor todavía:
Te pueden hacer sentir que “vas bien” cuando realmente estás en blanco.

6. Entonces… ¿qué métricas SÍ importan?

En etapa temprana, cuando la supervivencia depende del cash flow, solo hay cuatro métricas que deberías mirar cada semana:

(1) Ingresos reales

Dinero en la cuenta. No promesas.

(2) Flujo de caja

¿Aguantas un mes? ¿Tres?
¿O estás quemando dinero sin sentido?

(3) Retención de clientes de pago

No usuarios.
Clientes.

Si no vuelven, no hay producto.

(4) Costo de servir a cada cliente

Si cada venta te cuesta más que lo que cobras, no avanzas, retrocedes.

El resto de métricas solo tienen sentido una vez que estas cuatro están en verde.

7. El punto exacto donde las métricas profundas empiezan a ser útiles

Aquí está el matiz importante (y realista):

Las métricas avanzadas importan… pero solo cuando ya has demostrado que hay alguien pagando.

• Cohortes → útiles si ya tienes clientes y quieres mejorar retención.

• LTV → útil cuando tienes recurrencia significativa.

• CAC → útil cuando tienes canales estables.

• NRR → útil en SaaS con volumen.

Pero si estás generando 2.000–5.000€ al mes, no deberías estar haciendo un análisis de LTV multinivel.

En ese punto lo único que importa es:

Ya está.

El resto es distracción.

8. Los síntomas de que estás cayendo en el “teatro del crecimiento”

Si te reconoces en al menos uno, toca corregir rumbo:

• Celebras descargas pero no ingresos.

• Tienes miles de leads pero cierres mínimos.

• Tu dashboard está lleno… pero tu Stripe está vacío.

• Tu equipo dedica más tiempo a redes que a ventas.

• Mides engagement pero no retención.

• Te comparas con otras startups por seguidores, no por caja.

• Te felicitas por cifras que no mueven el negocio.

El teatro del crecimiento es cómodo.
La realidad del crecimiento no lo es.
Pero una te lleva a cerrar y la otra te lleva a escalar.

9. ¿Cómo volver al camino correcto? (Guía práctica de 5 pasos)

Paso 1 — Elimina el 80% de tus métricas actuales

Quédate solo con 4:

• Ingresos

• Clientes activos

• Retención

• Cash runway

Eliminar ruido es el primer paso para ver claro.

Paso 2 — Agenda una reunión semanal de “Realidad Operativa”

Una hora. Solo ventas e ingresos.

• ¿Qué hemos vendido?

• ¿Qué hemos perdido?

• ¿Por qué?

• ¿Qué aprendemos de cada conversación?

• ¿Qué hará el equipo esta semana para vender más?

Sin esto, la startup vive en piloto automático.

Paso 3 — Habla con clientes reales

No usuarios.
No leads.
No followers.

Clientes que pagan.

La información que dan tiene valor infinito.

Paso 4 — Reenfoca tu producto a lo que mueve ingresos

Antes de desarrollar features nuevas o dashboards coloridos, pregúntate:

Si no impacta directamente en ventas o retención, no es prioridad.

Paso 5 — Cierra rápido lo que no funciona

Canales que no convierten, campañas sin retorno, iniciativas sin impacto…

Cortar es duro.
Pero mantener lo inútil mata.

10. Cierre: La humildad de mirar la métrica que duele

Ser emprendedor no es fingir que va todo bien.
Es mirar la verdad de frente, incluso cuando duele.

Y la verdad casi siempre cabe en una sola frase:

Si la respuesta es buena, el negocio vive.
Si es mala, sabes exactamente dónde poner tu energía.

Ninguna otra métrica te ofrece tanta claridad.

Cuando ya tengas ingresos sólidos, volumen, equipo y estabilidad… ahí sí, abre el abanico de métricas profundas.

Pero mientras tanto —
Tu startup no necesita más números, necesita más ventas.

Gracias por leer

Alek.